El cambio horario es una cuestión permanentemente sobre la mesa. Las dos horas de desfase respecto al resto de países del mundo condicionan aspectos tan cotidianos como las comidas, la salida del colegio y el trabajo o la hora de ir a dormir. Una situación que perjudica nuestra salud.
El planteamiento del beneficio del cambio de hora es noticia estos días en todos los medios de comunicación, y desde Europa se aportan los datos de la encuesta global que se ha realizado este verano. Los resultados muestran un mayor desacuerdo, por parte de la población, de la modificación de la hora en verano, en cambio se prefería un horario igual durante todo el año.
El cambio de horario de verano se implantó en los años 70 sobre todo por los intereses en ahorro de energía. Actualmente estos beneficios se han demostrado marginales. Además los análisis del beneficio que aporta esta modificación en la salud también nos dan luz. El sueño es el gran afectado, pues el reloj biológico interno que nos indica los mejores horarios de sueño y vigilia (los ritmos circadianos), se sincroniza con la luz.
Desde el grupo de expertos en cronobiología de la Sociedad Española de Sueño, se han estudiado los diferentes beneficios y perjuicios de los escenarios del cambio de hora o mantenimiento de hora, sobre los ritmos circadianos, a fin de llegar a un consenso . Se acordó que el horario de invierno español (GMT + 1) es el que nos acerca más al horario solar natural, y que las consecuencias de adaptación al cambio de horario de verano no compensan los beneficios.
La eliminación del cambio de hora es una propuesta que ayudará a una mejorar la regulación de los horarios de sueño. Es un paso adelante a afrontar la Reforma horaria, lo que engloba todo la conciliación laboral y familiar.
Es muy importante recalcar que este cambio debería ir acompañado de una decisión política de conciliación laboral y familiar ya que no sirve de nada hacer un cambio horario si continuamos trabajando hasta las 20 o 21 horas, como ocurre actualmente.
Independientemente de los cambios en las franjas horarias que se vayan a establecer, desde la Clínica Estivill Sueño recomendamos adoptar algunas rutinas personales que mejorarían el bienestar familiar y nuestro descanso como por ejemplo adelantar la hora de salida del trabajo, adelantar la hora las comidas, sobre todo la cena, no regirnos por los horarios prime-time de la TV y utilizar la TV a la carta para ver los programas que nos interesan y no utilizar móviles ni tablets antes de ir a dormir.