Presentación de la guía Europea de consenso sobre el insomnio.
Recientemente se ha publicado la última guía Europea de consenso sobre el diagnóstico y tratamiento del insomnio. Es la actualización de los conceptos médicos aceptados por la comunidad científica que nos ayudarán a tratar mejor a las personas con insomnio. En nuestra clínica del Sueño seguimos estas indicaciones.
Aquí os dejamos el artículo donde nos hablan de la guía Europea de consenso sobre el insomnio.
AUTOR/ES: Riemann D, Baglioni C, Bassetti C, Bjorvatn B, Dolenc Groselj L, Ellis JG, Espie CA, Garcia-Borreguero D, Gjerstad M, Gonçalves M, Hertenstein E, Jansson-Fröjmark M, Jennum PJ, Leger D, Nissen C, Parrino L, Paunio T, Pevernagie D, Verbraecken J, Weeß HG, Revista: J Sleep Res. 2017 Sep 5.
Publicación que presenta las guías de práctica clínica europeas para el diagnóstico y tratamiento del insomnio desarrolladas por un grupo de trabajo de la European Sleep Research Society, con el objetivo de proporcionar recomendaciones clínicas para el tratamiento de pacientes adultos con insomnio.
La guía se basa en una revisión sistemática de meta-análisis relevantes publicados hasta junio de 2016 y va dirigida a todos los médicos involucrados en el manejo del insomnio y a los adultos con insomnio crónico. Se utilizó el sistema GRADE (Grading of Recommendations Assessment, Development and Evaluation) para clasificar la evidencia y proporcionar recomendaciones.
- El procedimiento de diagnóstico para el insomnio y sus comorbilidades debe incluir una entrevista clínica para conocer el historial de sueño (hábitos de sueño, ambiente de sueño, horarios de trabajo, ritmos circadianos), el uso de cuestionarios de sueño y diarios de sueño, preguntas sobre salud somática y mental, examen físico y medidas adicionales si son necesarias (por ejemplo, análisis de sangre, electrocardiograma, electroencefalograma (FUERTE RECOMENDACIÓN, EVIDENCIA DE CALIDAD MODERADA-ALTA).
- Se puede utilizar la polisomnografía para evaluar otros trastornos del sueño (por ej., trastorno de movimiento periódico de las extremidades, trastornos respiratorios relacionados con el sueño), en insomnio resistente al tratamiento, en poblaciones profesionales de riesgo y cuando se sospecha una percepción errónea del estado de sueño (FUERTE RECOMENDACIÓN, EVIDENCIA DE ALTA CALIDAD).
- La terapia cognitivo-conductual se recomienda como tratamiento de primera línea en adultos de cualquier edad con insomnio crónico (RECOMENDACIÓN FUERTE, EVIDENCIA DE ALTA CALIDAD).
- Se puede administrar una intervención farmacológica si la terapia cognitivo-conductual para el insomnio no es suficientemente eficaz o no está disponible.
- Las benzodiazepinas, los agonistas de los receptores de benzodiazepinas y algunos antidepresivos son eficaces en el tratamiento a corto plazo del insomnio (≤4 semanas; RECOMENDACIÓN DÉBIL, EVIDENCIA DE CALIDAD MODERADA).
- Los antihistamínicos, antipsicóticos, melatonina y la fitoterapia no se recomiendan para el tratamiento del insomnio (RECOMENDACIONES DE FUERTES A DÉBILES, EVIDENCIA DE CALIDAD BAJA A MUY BAJA).
- La fototerapia y el ejercicio necesitan volverse a evaluar para determinar su utilidad en el tratamiento del insomnio (RECOMENDACIÓN DÉBIL, EVIDENCIA DE BAJA CALIDAD).
- Las terapias complementarias y alternativas (por ejemplo, homeopatía, acupuntura) no se recomiendan para el tratamiento del insomnio (RECOMENDACIÓN DÉBIL, EVIDENCIA DE MUY BAJA CALIDAD).
¿Qué aporta este artículo? Dr. Javier Puertas Cuesta. Hospital Universitario de la Ribera
Hay que celebrar la publicación de esta guía de la European Sleep Research Society, realizada por un grupo de trabajo formado por 28 expertos de varios campos y países europeos.
Destaca la necesidad de una buena historia clínica (tabla 3) basada en los criterios diagnósticos de la (ICSD-3) (tabla 2). La historia médica y la anamnesis, que incluyen patologías médicas e historia de tratamientos médicos y sustancias de abuso. Se debe dedicar una especial atención al capítulo de la historia psiquiátrica y el perfil psicológico del paciente, trabajo, horarios y situación de pareja, así como la presencia de conflictos o situaciones estresantes.
La historia en relación con el sueño tiene especial interés y es conveniente que sea en presencia del compañero de cama si lo hubiere. Presencia o sospecha de patologías del sueño, desajustes laborales o inducidos de los horarios de sueño. Se sugiere el uso de diarios o agendas de sueño. El uso de la actigrafia puede dar una importante información respecto a los patrones de sueño en registros de más de un día.
La polisomnografia no es un método diagnóstico de rutina en el insomnio, ya que muchos pacientes insisten en “hacerse la prueba del sueño” como si fuera la clave de todo y después se sienten decepcionados cuando descubren que incluso en la prueba duermen más de lo que creen. Solo estaría indicada en caso de sospechas de otras patologías del sueño, insomnio pertinaz a pesar del tratamiento, insomnio en profesiones de riesgo o insomnio por mala percepción del sueño.
Las evidencias de la terapia farmacológica son en general débiles y siempre asociadas a terapia cognitivo conductual de entrada. Las benzodiacepinas y los antidepresivos sedantes deben evitar darse por más de 4 semanas, si fuera preciso usarlos, pero son una alternativa cuando la terapia cognitivo conductual se muestra ineficaz o no puede administrarse. Los metaanálisis sobre el efecto de la melatonina muestran un efecto hipnótico leve, pero en general es un fármaco seguro. Se hace hincapié en los efectos del ejercicio y la luminoterapia, más porque ha sido algo poco investigado que por su eficacia, pero se recomienda como tratamiento complementario.
El uso de benzodiacepinas y agonistas del receptor de BDZ como los fármacos Z (zolpidem, y zopiclona) en general son recomendados, y aunque no hay estudios de su eficacia, la terapia intermitente, puede ser una alternativa en pacientes con insomnio crónico de larga evolución.
Finalmente, el algoritmo de la figura 1 resume las recomendaciones. Destaca la importancia a largo plazo de controlar y tratar comorbilidades que pueden influir en el curso del insomnio, como el dolor crónico, el síndrome de piernas inquietas o un trastorno de ansiedad.
La implementación de forma regular de la terapia cognitivo conductual sigue siendo limitada en nuestro sistema nacional de salud y, dada su importancia y evidencia, debe ser una demanda de los profesionales que nos dedicamos a esta trastorno tan prevalente y de manejo a veces poco satisfactorio. Estas Guías, realizadas en Europa y con los medios y características de los sistemas de salud públicos europeos son desde ahora la referencia del tratamiento del insomnio crónico.
European guideline for the diagnosis and treatment of insomnia